Mercedes Morales le apuesta al país

Se trata de Mercedes Morales, una mujer decidida y cuidadosa que le apuesta al trabajo social como herramienta para construir un mejor país. Desde el año 2000, ha venido desempeñando su labor como docente con un ahínco importante en el  ámbito social. Estuvo al frente de  Proyección a la Comunidad hasta el año 2014 en el Parque Social y actualmente es la responsable de la Dirección de Promoción de Responsabilidad Social Universitaria.

Para Mercedes, ser docente es mucho más que simplemente enseñar una materia y dar clases. La pasión que siente por la labor que desempeña se desborda en su rostro, pues cuando habla de su profesión lo hace segura de cada palabra que expresa, sumándole una sonrisa de satisfacción.

Me gusta lo que hago

Con una trayectoria de casi 28 años en la Católica, comenta que sus inicios en el Parque estuvieron  relacionados con elvoluntariado que hacía en la escuela de Educación. En el año 2000, asume la coordinación del Plan de Acción Solidaria mediante el cual se estaban realizando trabajos con los damnificados del deslave de Vargas; estuvo dedicada a este proyecto por seis años.

En el 2001, es nombrada directora de Proyección a la Comunidad y pasa a ocuparse ya no de una emergencia, sino de un problema estructural en el país. Llega al cargo con la idea de organizar una forma de acción mucho más interdisciplinaria del trabajo social que se lleva a cabo en la universidad. Opina que el trabajo que se viene realizando desde Proyección es muy valioso y confiesa que eso la llena de orgullo y felicidad.

Innova en su desempeño como directora de Promoción de la Responsabilidad Social Universitaria. Y lo hace partiendo desde el objetivo de promover la responsabilidad social interna y externa de la universidad como parte de su identidad. Describe que trata de impresionar socialmente a los estudiantes desde la sensibilidad por el otro y enumera los cinco impactos en los que se fundamenta su trabajo: el educativo, de investigación, social, ambiental y organizacional. 

La profesora comenta que parte importante de su labor consiste en presentar proyectos suficientemente sustentables como para que las organizaciones, tanto públicas como privadas, nacionales e internacionales, quieran apoyar el desarrollo de estas iniciativas sociales y lograr tener jóvenes egresados que den respuesta a la país desde el trabajo en conjunto con las comunidades día a día, construyendo ese país que todos queremos.

Afirma también tener la suerte de que le paguen por lo que le gusta hacer. Para ella, su trabajo es su pasión, es tanto así que aparte de trabajar de lunes a viernes, se dedica muchos fines de semana.

Lo social es parte de mí

Es madre y le gusta compartir con su hijo yendo al teatro o al cine en los ratos libres, y también con su madre que vive con ella. Se considera una persona muy familiar y lo disfruta. A veces va los domingos a La Vega para oír misa, más que por obligación por deseo.

Un sueño

Para la docente y voluntaria, el Parque es un sueño, con los ojos aguados y la voz quebrada confiesa que aún recuerda al padre Luis Azagra caminando por sus espacios. Pero igualmente admite, que aún falta que los estudiantes se sientan enamorados del Parque y que vean en él parte de la solución a la problemática del país. Un lugar donde se pueden construir soluciones dialogando entre las comunidades, las universidades y  los entes políticos.

Termina nuestro diálogo con firmeza al decir “Por eso es un sueño y por eso se creó; porque el Parque es un riesgo y la gente le tiene miedo a los riesgos, pues prefieren quedarse en su zona de confort”.

Entrevista y fotos: América Cañizalez